______________________________________________________________ La plantilla anterior se la cargó Pifas.
¡¡¡AAAAAAAHHHHHHHH!!!!! (muy emputado) ¡¡¡AAAAAAAHHHHHHHH!!!!!
…Bueno pues ya qué. En lo que vuelvo a hacer la estructura de personalización –o sea desmadrar la bonita template actual- voy a estar ocupao’. Lo bueno es que hoy salí de vacaciones y tengo dos semanas para hacerlo. Snif.
Dándole una forma al postRecuerdo a Plutarco Haza en "En el aire" (1995); él era locutor de “Radio Púrpura” y la historia es una crónica de las comunas hippies en México.
Una de sus tradiciones –mencionaba- era que cada vez que alguien quería cambiar debía cortarse las greñas.
Esa película setentera me agarró con una revista porno y un disco de Led Zeppelin en algún baño de secundaria y se puede mencionar al cine como uno de mis tempranos agentes socializadores (¡Hay, güey!).
Como sea yo me arraigué solito esa tradición y mas de alguna vez me he tusado la cabeza y las cejas en el baño de mi casa. Bueno, pues creo eso es lo que ha pasado con el blog. Todos sabemos que una plantilla se va amoldando a nosotros como unos zapatos nuevos a nuestros pies, y empezar con asuntos nuevos es una cimitarra con peluchito, pues hay un tortuoso camino (snif) de adaptación y un ver al mismo tiempo con inquietud adolescente un alba más acercarse a nuestros ojos.
Oj-alá (siempre lo quise escribir así, je je) y el cambio sea para bien.
¿El motivo?Lo desconozco en su gran parte, pero ayer cuando guardaba unos cambios de plantilla, el internet se cortó y Blogger guardó sólo la primera mitad del código, es decir la que no tiene ni los enlaces ni los directorios ni el contador de visitas ni ni madres, nomás el nombre del blog. (Es como aquella vez que mi amigo Samuel se dejó crecer el pelo y una mañana su madre entró a su habitación y le metió unos maquinazos y tijeretazos mientras aún dormía; Pobre güey).
Dijera Cholo-man:
“Como quiera no me agüito ese…”.______________________________________________________________