Es sufuciente.
Muchas personas que admiro han muerto a los veintisiete, pero es poco el orgullo que me da seguirlos a la tumba.
Hasta ayer, tres adivinadores de diferentes lugares, que no se conocen, por tres métodos distintos, me han dicho que moriré jóven, y rato después que concretamente a los veintisiete.
Nunca he sido religioso, mucho menos supersticioso, pero esta situación es una que me da quiqui/mello/saca de onda/no mola o lo que guste usted.
Pero hoy, en éste link:
http://www.deathclock.com/, me han adivinado esta pantalla por un método de medidas. Enero de 2013. Exactamente tendré 27.
P.D. : Ya publicaré pronto mi testamento on-line.
P.D. 2: Chale.