Necesito un cigarro milagroso. Uno que me embriague en morfina. Uno que me haga setir menos pesado, uno que sepa rico.
Uno que suene cuando se quema, que suene como las ojas secas pisadas quedito.
Necesito un cigarro milagroso para quitarme el apetito.
Necesito un cigarro que me de fuerza para largarme, para dormirme o para pensar. Uno muy milagroso, como buen Santo que es.
Que haga harto humo, para alterar la visibilidad. Que se pierdan las formas y se vuelvan a perder. Que algunas se quemen y otras se me adhieran a los pulmones.
Necesito un cigarro milagroso que me salve los pulmones. Necesito un cigarro, para fumar y beber.